Merkabah


La evolución del cuerpo físico y del espíritu – Maestra María - 09/05/2021

Cuando observamos al Merkabah vemos dos triángulos opuestos el triangulo superior apunta su vértice hacia abajo, mientras que el triangulo inferior apunta su vértice hacia arriba, en estas dos posiciones podemos encontrar representados al cuerpo físico y al espíritu o si se prefiere a la materia densa y a la energía sutil.

El triangulo superior gira hacia la derecha en el sentido de las agujas de un reloj y el inferior hacia la izquierda en sentido contrario a las agujas de un reloj y en este movimiento podemos encontrar una referencia hacia lo positivo y lo negativo o bien a la electricidad y al magnetismo.

En fin, en todos los casos estos dos triángulos enfrentados de esta manera simbolizan a dos energías contrarias que se entrelazan de manera muy complementaria formando una tercera energía neutra y expansiva, este comportamiento de las energías esta simbolizada por este “Merkabah” que no es otra cosa que el fundamento de la evolución en el universo.

Por esta razón se considera al Merkabah como un vehículo de luz y para utilizarlo el ser humano debe ubicarse en el centro de él, el ser humano en evolución vive a través de su mente y la mente es un fractal del espíritu superior, a este fractal del espíritu se lo llama “ALMA” y esta ligado al cuerpo físico a través del cerebro por el que conecta con el espacio/tiempo, en lo que concierne al espacio están los puntos cardinales y la relación de estos puntos terrestres con el espacio universal y la relación de la mente con el tiempo se hace a través del pasado presente y futuro y la relación de esto con el universo.

La combinación del espacio y del tiempo se opera dentro del cerebro como un espacio/tiempo universal llamado “consciencia” dividido en tres escalas fundamentales que son el inconsciente, el subconsciente y el consciente que es tanto físico como espiritual y a través de todo ello se realiza la evolución.

¿Cómo evoluciona el cuerpo físico?

El cuerpo físico evoluciona desde abajo hacia arriba, la Maestra nos explica que el planeta Tierra, se alimenta de las energías del sistema planetario o sea de las energías entregadas a los planetas por el sol llamado “Helios y Vesta”, todo en este planeta esta irradiado y energizado por la energía solar y a través de ella funciona y evoluciona; a partir de allí la creación y producción planetaria que llamaremos “la naturaleza” crea físicamente todo lo que en ella vive.

La Tierra físicamente hablando esta formada de materia inorgánica y de materia orgánica, lo que de alguna manera ella también cuenta con un cuerpo físico y un alma a través de estas dos formas, lo que nos enseña que todo es creado en forma de espiral, pues una cosa forma a la otra de manera continua y evolutiva o sea ascensional a todos los niveles de la creación universal, que sea un planeta, una galaxia o un ser, todo funciona igual.

La Maestra nos dice que de igual manera todo absolutamente todo, esta relacionado de una manera o de otra con el universo entero, nada escapa a esta regla y lo más bajo en energía es siempre atraído por lo más alto y viceversa, hay una intercomunicación que crea un movimiento perpetuo y elevador.

En el caso del planeta Tierra, esta creación se divide en “Reinos”, el mineral, el vegetal y el animal, aunque luego existan subdivisiones, solo hablaremos de manera general e igualmente de manera sintética diremos que el mas pequeño alimenta al mas grande, es decir el de menos consciencia alimenta al que tiene más consciencia.

El mineral alimenta al vegetal y el vegetal alimenta al animal, de esta manera evoluciona la materia densa, todo lo que no siga esta regla es considerado como “Paracito”, un vegetal que se alimenta de otro vegetal es un paracito y un animal que se alimenta de otro animal también es un paracito, desde el punto de vista biológico por supuesto, todo vegetal debe nutrirse de minerales y de energía solar y no de la sabia de otro vegetal, de la misma manera todo animal cualquiera sea su evolución, debe alimentarse de vegetales, de sabia y clorofila y no de sangre. Grosso modo el “Reino” inferior alimenta al “Reino” superior, todo lo que se alimente de su propio “Reino” es paracito.

De la misma manera todo reino inferior que se alimente de un reino superior es paracito y va contra las leyes naturales, lo que crea enfermedades de todo índole.

¿Cómo se alimentan y crecen el alma y el espíritu?

A la inversa de lo que ocurre con el cuerpo físico, aunque el crecimiento se haga igualmente desde abajo hacia arriba o sea de manera evolutiva y en espiral, el alimento espiritual no viene del mas pequeño al mas alto, sino de manera inversa, el mas evolucionado, o sea el mas grande se ocupa del mas pequeño para ayudarlo a crecer mental y espiritualmente.

Este acompañamiento se basa en la experiencia de vida de cada uno y de la sabiduría que haya podido integrar en su mente y en su espíritu, lo que define su capacidad de ocuparse de los otros sin causarles perjuicios y además ayudarlos a crecer y a evolucionar.

Esta es otra ley universal y cada uno de nosotros evolucionaremos de manera paralela, aprendiendo del mas sabio e instruyendo al menos sabio de manera continua, pues al enseñar ayudamos a los otros y además al enseñar también se aprende, viendo la reacción de los otros, lo que nos lleva a analizar un aspecto de cada cosa desde un punto de vista diferente de nuestra propia opinión y analizando en ello el por y el contra de cada situación.

La intervención del más grande sobre el más pequeño

Esta intervención debe hacerse siempre de manera positiva y yendo en el mismo sentido de lo que llamamos “Evolución”, que esto se haga hacia otros seres como hacia otros reinos inferiores, nada debe hacerse yendo en contra de las leyes universales, de esta manera no se debe intervenir en la naturaleza ni en la vida de otros seres causando daños y perjuicios que en más de una oportunidad son de destrucción total, haciendo la solución del problema, casi imposible.

La evolución consiste en seguir las leyes universales al pie de la letra, haciendo valer siempre la verdad y no lo contrario “En plena consciencia”, es decir dentro del bien.

Copyright © Monica Sanchez